El festival Brava Madrid, que tuvo lugar este fin de semana en la capital, ha dejado un regusto amargo para algunos asistentes y una nueva polémica en el mundo de los festivales y los abusos que últimamente se denuncian en torno a ellos. Así, aquellos que optaron por el autobús de la EMT en horas de la madrugada se encontraron con una sorpresa desagradable: un alto costo por un servicio que el Ayuntamiento anunció como gratuito. La controversia surge en medio de otras críticas que rodearon el evento.
El Alto Precio del Transporte: un Descontento Generalizado
El recorrido en el bus lanzadera desde el recinto ferial hasta la plaza de Castilla, de unos ocho kilómetros, se tradujo en un inesperado desembolso de entre ocho y diez euros, una tarifa que muchos consideraron desproporcionada. Esto resulta aún más sorprendente considerando que un boleto sencillo en el transporte público municipal cuesta solo 1,50 euros. Incluso el Metrobús, que ofrece diez viajes, se encuentra actualmente a solo 6,10 euros debido a un descuento temporal. Además del alto costo, se suman los gastos de gestión, elevando la tarifa final a nueve u once euros.
¿Gratis o no Gratis? El Debate sobre el Transporte
Después de las protestas de los asistentes, el Ayuntamiento de Madrid aclaró que Brava Madrid tenía el derecho de cobrar por el uso del bus lanzadera, ya que este no era un servicio especial en el contexto del festival, sino un servicio contratado por la promotora, que tenía el control sobre la tarifa. Sin embargo, el área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad considera que el precio es «abusivo» y ha iniciado una investigación para evaluar las implicaciones de este cobro en el plan de movilidad, que podría haberse visto afectado.
Un certificado médico para introducir comida
La polémica de los tickets de bus lanzadera se une a la noticia publicada por elDiario.es este fin de semana, en la que se contaba cómo la organizadora de Brava Madrid reclamaba un certificado médico a los asistentes que intentaban introducir comida en el recinto del festival alegando intolerancias alimentarias.
Una práctica que ha sido denunciada por Facua ante la Dirección General de Comercio y Consumo de la Comunidad de Madrid, ya que esta organización de consumidores considera que es abusivo solicitar a los asistentes datos de carácter protegido sobre su salud, e impedir el acceso con comidas y bebidas del exterior al recinto.
“Supone el establecimiento de una cláusula abusiva para los consumidores, en tanto que se están solicitando datos de carácter personal y especialmente protegidos, pudiendo ser únicamente recabados, tratados y cedidos por razones de interés general, sin que concurra en este caso dicha causa”, indican desde Facua, que también denunciará los 3 euros de cargo que Brava Madrid cobrará a las personas que soliciten la devolución del dinero no consumido durante el festival en su pulsera cashless.
El Festival Brava Madrid ha generado controversia al cobrar por un servicio de transporte que inicialmente se anunció como gratuito. La situación ha llevado al Ayuntamiento a abrir una investigación debido al alto precio del boleto y las críticas de los asistentes. Esta polémica se suma a otras relacionadas con el evento y su organización.
Nota: Contenido Actualizado con fecha 12/09/2024 08:04
