Dejadme que reescriba el tango del eterno Carlos Gardel, dejadme que use sus versos para hablar de ellos, y perdonadme por la osadía.
“Volver con la frente marchita,
Las nieves del tiempo platearon mi sien
Sentir que es un soplo la vida
Que treinta años no es nada (…)”
Y es que en la Roxy veía a unos chicos que empezaban, con la ilusión de comerse el mundo, y con los nervios de un futuro que sabían incierto.
Era 1995 cuando unos chavales de L’Eliana ganaban el certamen Circuit de Rock, de esa noche hay recuerdos vagos, muchas cervezas, muchas risas con los amigos, y de fondo ellos. Era cuando las salas apostaban por los grupos emergentes, y cuando el público disfrutaba viendo bandas sin saber si era el comienzo de una carrera fulgurante, o el último gran concierto que darían.
Y en el caso de estos chicos fue lo primero, ese fue su primer gran concierto, de un escenario del que ya no se bajarán, llegaron discos inolvidables, escenarios principales, y conciertos por las mejores salas de España, y también más allá de nuestras fronteras, porque su música es de todos.
En sus orígenes fueron Jorge con esa voz tan reconocible, Jorge Marco con Pau Roca y Juanjo Espinosa, este último sustituido por Marc Greenwood allá por el comienzo del nuevo siglo.
Su primer LP ya queda tan lejano en el tiempo, por entonces el que os escribe lucía melena al viento, y ahora su cabeza es un desierto yermo, pero no por eso pierde la magia, ese disco que empezaba con “Mi habitación” su primer himno para los seguidores de la banda. Siguieron lanzando discos y éxitos que ya forman parte de nuestras vidas, “Ayer” “Voy a hacerte recordar” “Indestructibles” “L’Albufera” (que adoro escuchar cuando estoy viéndolos fuera de casa) “Febrero” “Segunda oportunidad”… y así podría seguir hasta aburrir a los que me leen. Son tantas, que me cuesta seleccionar, y son mágicas porque siempre hablan de sueños, de todo aquello que cada uno vivimos, y todas podrían haber sido escritas para nosotros, por eso nos llegan al corazón.
Y como decía, son ya 30 años en los escenarios, y hay que celebrarlo de manera especial, a lo grande y con mucha clase.
Y para esto, el próximo 22 de mayo de 2026 van a ofrecer un concierto en la tierra que tanto quieren, y que Jorge recuerda tanto en sus días en Noruega acompañado de la gente que ama.
Ese día estarán en el Palau de la Música con un concierto especial, acompañado por la Orquesta de Valencia tocará muchos de sus éxitos.
Al frente de esta grandísima Orquesta estará el Maestro Daniel Abad Casanova, el director se puede considerar uno de los más versátiles y capaz de cautivar a todos los públicos. Su estilo es tan amplio que tan pronto dirige una pieza barroca como se junta con un grupo indie para llevar la música sinfónica a todos los públicos.

No es la primera vez que se mete en un “embolado” semejante, ya lo hizo en el pasado, y con gran éxito, al lado de los murcianos de “Second” y ahora acompañará en este 30 aniversario a “La Habitación Roja”
Y es que el grupo de L’Eliana necesitaba un director al nivel de ellos, y en Daniel lo han encontrado, porque ha dirigido prestigiosas orquestas sinfónicas como la Orquesta y Coro de RTVE, la Orquesta de Valencia , la Orquesta Sinfónica de la Región de Murcia, ADDA Sinfónica, Sinfónica de Castellón, Sinfónica de Albacete, Inegale Joven Orquesta, Orquesta de la Ópera de Andorra, Joven Orquesta Barroca de la Comunidad Valenciana, Sinfónica Ciudad de Elche, Orquesta Ciudad de Llíria, New Professionals Orchestra (Londres), Jenaer Philharmoniker (Alemania), Filarmónica “Oltenia” Craiova (Rumanía), Banda Sinfónica Municipal de Las Palmas de Gran Canaria, Sinfónica de la Universidad Miguel Hernández, y muchas más.
Quienes me conozcan, saben que no soy imparcial con Daniel, nos une una amistad y también un amor por la música, pero quienes puedan disfrutar ese día, verán que todo lo que digo es verdad.
Así que cojan sus agendas, y anoten en mayúsculas que el día 22 de mayo de 2026 podremos disfrutar de un concierto único, irrepetible e inolvidable.
Yo estaré, porque La Habitación Roja es parte de mi vida, y en un momento como este quiero estar presente. ¿Y tú?
